- 28 de abril de 2017
Los varapalos de la justicia europea obligan a retocar el parche de la anterior reforma hipotecaria
El Gobierno dará un plazo adicional para denunciar cláusulas abusivas como pide la Corte de Luxemburgo. El Tribunal europeo ya obligó a incluir esta vía para suspender los desahucios en 2013.
Mariano Rajoy se prepara para impulsar la que será la segunda reforma hipotecaria que apruebe desde que llegó al poder en diciembre de 2011. Y, como ya ocurrió con la primera remodelación de la legislación sobre el crédito para la compra de vivienda, el Gobierno aprovechará la nueva normativa para dar cumplimiento a algunas de las exigencias impuestas por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
De hecho, el Ejecutivo se ha visto obligado a incluir en esta ocasión un parche para corregir el remiendo de última hora que ya tuvo que introducir en su reforma anterior ante un varapalo dado entonces por la Corte de Luxemburgo: el referente a los plazos para denunciar la existencia de cláusulas abusivas en la hipoteca.
En marzo de 2013, a raíz del célebre caso de Mohamed Aziz, el TJUE dictaminó que la legislación española era contraria al derecho comunitario en materia de protección al consumidor pues no permitía a los jueces suspender un desahucio si el contrato hipotecario incluía cláusulas abusivas. Para corregir esta situación, el Ejecutivo dio poderes a los jueces para que a partir de entonces pudieran paralizar las ejecuciones hipotecarias si detectaban una situación de indefensión del afectado frente a la entidad financiera.
Para los casos ya judicializados entonces, el Gobierno aprovechó la reforma hipotecaria de mayo de 2013 para introducir un periodo extraordinario de 10 días en el que los afectados pudieran denunciar la existencia de cláusulas abusivas en el la hipoteca que estaba siendo ya ejecutada. Los beneficiarios de la medida debían de ser informados de esta nueva posibilidad en el plazo de un mes desde la entrada en vigor de la reforma.
Con el tiempo, sin embargo, el Tribunal de Justicia de la UE ha acabado cargando también contra esta solución dictaminando que “la imposición de este plazo no permite garantizar que los consumidores ejerzan efectivamente sus derechos”.
El Gobierno busca responder ahora a esta nueva reprimenda de la justicia europea introduciendo en su segunda reforma hipotecaria un nuevo periodo extraordinario para denunciar la existencia de cláusulas abusivas. En los mismos términos: Se dará un mes desde la entrada en vigor de la nueva norma para informar a los afectados de que cuentan con esta opción y estos, a su vez, dispondrán de 10 días para señalar las condiciones hipotecarias que consideren opacas o abusivas.
Los procedimientos de desahucio a los que se refieran las denuncias quedarán entonces en suspenso hasta clarificar la validez de las cláusulas señaladas. Podrán beneficiarse todos los que no fueran informados debidamente en 2013. Está por ver qué ocurre con quienes no lo fueron y ya perdieron su casa.
FUENTE: CINCODÍAS